Cuentan que José Ortega y Gasset fue a presenciar una corrida de toros de El Gallo y que, al acabar el festejo, se acercó al maestro para que un amigo común les presentara. El torero quiso saber a qué se dedicaba ese hombre tan fino que decía sentir admiración por él y, cuando el joven Ortega le respondíó que a la filosofía, El Gallo se le quedó mirando muy serio y exclamó una frase legendaria: «Hay gente pa to». Me pregunto qué hubiera dicho hoy al enterarse de que hay quien estudia la actividad de las células cerebrales de las langostas mientras ven fragmentos de La Guerra de las Galaxias o los aromas que desprenden 131 especies de ranas cuando se estresan. Y si no me creéis pinchad aquí y poneos al tanto de la entrega de los galardones del Ig Nobel en la Universidad de Harvard.